Rabia, frustración y orgullo.

Tras haber ganado de forma consecutiva los dos primeros partidos de la temporada, nos tocaba jugar en casa frente al Vallecas c.f, un equipo aparentemente inferior debido a su posicionamiento en la clasificación. Tras el pitido inicial pudimos comprobar que iba ser un partido difícil, intenso y muy igualado. Las apariencias engañan y es que el nivel del rival no se veía reflejado en la clasificación. Una primera parte floja, con precipitaciones en la portería, en defensa y mal posicionamiento de los medios nos pasó factura con 2 goles. Llegamos al minuto 40’ con un resultado de 0-2 lo cual fue un contratiempo para nuestros jugadores, algo desconcertados por el desarrollo del partido. Nada más empezar la segunda parte, la reacción de todo el equipo y la entrada de Alex al terreno de juego nos hicieron empatar el partido con goles de Mateo y Javi. A partir de ese momento, el rival frustrado por la pérdida de ventaja se vino abajo y el liceo empezó un asedio perpetuo a la portería rival. Por culpa de la presión de querer ganar, las prisas y la mala fortuna no conseguimos finalizar el partido encadenando la tercera victoria consecutiva; una pena.